sábado, 14 de febrero de 2015

6 CATEGORÍA PREADOLESCENTES

NIÑOS DE CATEGORÍAS 9, 10 Y 11 AÑOS (Prepuberales)

Primera construcción de sentido del Otro en un grupo por parte de un niño. 

EDAD DE LA INICIACIÓN MÚLTIPLE EN FORMACIÓN DEPORTIVA.

EDAD DE LA FORMACIÓN DEL RECONOCIMIENTO DEL LIDERAZGO POR PARTE DEL PREADOLESCENTE

ETAPA IDEAL PARA LA FORMACIÓN TÁCTICA



Esta no es aún la edad de la especialización deportiva.

El objetivo de la presente publicación (en particular esta entrada) es la de ofrecer elementos comprensivos para la planeación de microciclos en los que las características propias de la maduración de un preadolescente son determinantes y por ende el punto de partida del plan de formación.


PORCENTAJE DE LA CANTIDAD DE CAMBIOS DURANTE LA PREPUBERTAD


50%











38%




Dimensión Social



Dimensión Física



Dimensión Psicológica
12%




Si pudiéramos cuantificar la cantidad de cambios durante la prepubertad, en las edades propias de la preadolescencia (9 a 11 años); se podría apreciar que la gran mayoría de cambios se dan en la dimensión social (la mitad del total de los cambios de dicha edad), le siguen los cambios de la dimensión física (38%) y finalmente estarían los cambios de la dimensión psicológica (12%).

DIMENSIÓN SOCIAL:


Edad propicia para aprender a reconocer la complementariedad necesaria para crear equipos efectivos.
Emerge un interés por la vida social que llevan sus pares, de la cual el joven se convierte progresivamente en miembro. Se podría asegurar que es la etapa en la que gracias a las sesiones de “entrenamiento” puede transformar su motivación orientada a la afiliación. En la Escuela o en el Club deportivo se le forma a partir de juegos y actividades recreativas en las que va siendo consciente la importancia de aceptar reglas de grupo; igualmente se le debe incentivar a crear, organizar y regir sus propias  estrategias de juego. El DT o profesor es un modelo de la manera como el interioriza las normas que regulan la convivencia a favor del compromiso deportivo.

ES LA ETAPA FAVORABLE PARA MADURAR LIDERAZGO

Las actividades durante esta etapa lo deben ir suscitando a demostrar que está dispuesto a intervenir desde un rol socialmente activo en el que provoque que su voz se escuche, se esfuerce por crear mecanismos de participación y reconozca que él puede ser modelo de actuación. Es decir, se requiere “DT” poco directivos y más bien animadores; por no decir que facilitadores.
Es decir que en esta edad hay más formación que entrenamiento. Esto quiere decir que si se habla de entrenamiento debe ser más desde una técnica en particular dentro de una actividad de recreación en la que se juega a ser entrenador o jugador. Es decir, que cualquier actividad se debe enmarcar dentro de la connotación de juego, en las que el prepúber juegue tanto a ser entrenador como entrenado.

LO QUE UN PREPÚBER APRENDE JUGANDO A SER ENTRENADOR:


Este tipo de juegos en los que los prepúbers asumen el rol de entrenador, debe ser planeado con suficiente antelación de tal manera que todos y cada uno de los preadolescentes tenga la oportunidad de preparar muy bien su sesión como entrenador. Se sugiere que los más interesados en serlo, serían los primeros en asumir el rol.
Debe haber un “entrenador” por sesión, el profesor le entregará el grupo y éste asumirá como él comprenda el rol. Será un espacio entre 5 y 15 minutos. Al final el profesor le preguntará sobre aspectos que destacan de éste líder que se desempeñó como DT. Otra sugerencia es que los juegos tengan, además de una temática, la condición de utilizar balón dentro de la cancha.

Aprendizajes:

1.       Autoobservar su propio estilo de comunicación a favor del cumplimiento de la tarea.
2.       Observar diferentes modelos de autoridad.
3.       Que la autoridad parte de una actitud de escucha; no de hacerse escuchar.
4.       Que no hace falta gritar para hacerse escuchar.
5.       Que tener autoridad es sinónimo de conocer profundamente de un tema y ser coherente con el conocimiento que se presenta.
6.       Reconocer la importancia de una información clara y precisa para la presentación de las normas.
7.       Que el sentido de la autoridad de un DT está en tener en cuenta los intereses de las personas de su grupo.
8.       Diferenciar mandar de dirigir.
9.       Que todas las personas tenemos maneras diferentes de actuar el liderazgo.
10.   Que la novedad del liderazgo está es en recrear la realidad, hacerlo distinto todas las veces.
11.   Reforzar la inteligencia emocional en relación a la adaptación de los diferentes estilos de dirección en un mismo rol.

Estos once aprendizajes que se plantean (se deben agregar otros más) son un criterio de valoración que el Profesor debe tener en cuenta como punto de llegada en el momento del cierre para ir propiciando un proceso de enseñanza-aprendizaje con respecto al liderazgo.

DIMENSIÓN FÍSICA

Es la edad desafiante por excelencia para un niño que se expone a los primeros cambios de apariencia física, eso le exige una actitud que él ira explorando, de ahí que sea común verlos con variados cambios de conducta.
El cuerpo responde bien a los esfuerzos, tanto si influyen sobre la resistencia como sobre la fuerza muscular, evidentemente dosificados y prestando particular atención a la recuperación y a la intensidad. El fútbol es un deporte paramórfico y acíclico; los preadolescentes no están dispuestos aún a responder a este tipo de exigencias; por lo tanto las actividades predeportivas y deportivas deben tener claros contenidos simétricos y cíclicos. El Profesor que insista en verlo al contrario hará que los jóvenes deserten de los entrenamientos, ya que ellos sienten que no encajan y asumirán que este deporte no es para ellos.

 EJERCICIOS QUE NO PROVOCAN CAMBIOS DURANTE EL PROCESO DE ENTRENAMIENTO EN ESTA ETAPA

Durante esta edad hay algunos ejercicios que aunque son rutinarios no aportan a elevar la excelencia física; por mucho optimizarían las condiciones propias del preadolescente; pero se corre el riesgo que el joven se desmotive y asuma que no está para este deporte. Vale aclarar que en esta edad toda la preparación física es recomendable realizarla a través de juegos que imiten de alguna manera el deporte que lo convoca.
Algunos ejemplos de lo dicho anteriormente se pueden ubicar en: Juegos para el desarrollo de la velocidad.

En la gráficas se plantean tipo de ejercicios que no son recomendables en esta etapa.


 Este tipo de artilugios deportivos pueden incentivar al preadolescente a participar, ya que son elementos propios del entrenamiento del fútbol. Hasta ahí es lo que todos conocemos; pero que se pueda asegurar que gracias a la utilización de estos elementos los prepúber mejoran su condicionamiento físico, se ha probado que no.

Es más; utilizarlos dentro de la rutina del "entrenamiento" le exige al muchacho un rendimiento que a él no lo entusiasma tanto; prefiere desertar, acusando otro tipo de razones. Y es probable que perdamos auténticos talentos del deporte.

Utilizar en esta edad este tipo de artilugios debería ser de manera recreativa, para que desde la lúdica ellos vayan descubriendo otro tipo de factores que sean más retadores y no los lleve a exigir unas competencias físicas que ellos no están en condiciones. 

DIMENSIÓN PSICOLÓGICA

En esta etapa estar con niños de su propio género aportará notablemente a su propio proceso de identificación sexual y afirmación del yo; que no es otra cosa que la de presentarse socialmente como alguien que puede ser caracterizado; de ahí que vestir el uniforme de una escuela o club deportivo sea tan importante para él. Está aprendiendo a depender de sí mismo y por otro lado a obedecer a los profesores; es por tanto que su autoestima esté aún en obra negra, está en proceso de prueba, algunas veces con alta autoestima, mientras otras será dependiente.  La inteligencia emocional puede observarse por la manera como se adapta con facilidad/dificultad, así como también que pueda reconocer que una cosa son sus propios problemas y otra muy distinta los problemas ajenos. 

Cognitivamente ya asume la constitución de esquemas operativos lógicos y formales con una relativa capacidad de llevar a término las propias acciones y conocimientos de las posibilidades propias. Buena capacidad para mantener la atención, sentido de la norma. Edad llamada de la razón.

PAUTAS QUE SE DEBEN TENER EN CUENTA PARA ESTAS CATEGORÍAS

·         De las etapas de maduración, esta es una de las más lentas; así como también en algunos casos, es la que más rápido se supera.
·         Es por lo tanto muy complicado asegurar cuál ha sido el factor determinante del cambio: si el desarrollo particular del niño o el entrenamiento.
·         El crecimiento por sí sólo provoca cambios en el rendimiento; muchas veces los hace aparecer torpes, en algunas ocasiones se hacen lentos en el aprendizaje (les cuesta trabajo comprender).
·         Caso especial son los preadolescentes talentosos. Éstos aprenden con excesiva facilidad y se reconocen fácilmente porque están recreando todo el tiempo, son multilaterales e incansables, a veces monotemáticos, se aíslan del resto; pareciera que lo único que valoran es especializarse en jugar.
·         Por cuestiones propias del desarrollo, el entrenamiento no puede provocar cambios fisiológicos en los pre-púber  tal y como si sucede en un adulto. Es decir,  el incremento del oxígeno máximo, el lactato muscular entre otros; no superará las condiciones propias de la edad.
·         Como es la edad en la que se optimiza lo que se tiene, es necesario evitar entrenamientos para maximizar. Por lo tanto, el entrenamiento debe ser multilateral; en el mejor de los casos, global.
·         Un indicador objetivo está en la talla y el peso, para alzar el IMC (Indicador de Masa Corporal) antes y posterior a la temporada. Esto permitirá problematizar el tipo de alimentación que tiene el preadolescente.
·         Gracias a que su desarrollo muscular se evidencia, a que su coordinación general y específica ha mejorado notablemente, que responde bien a los ejercicios de resistencia y que la recuperación después del esfuerzo es relativamente rápida, es que se puede asumir que es la edad perfecta para el aprendizaje de la técnica.
·         Empero, ya que la necesidad gregaria se ha acrecentado sería más ventajoso para el aprendizaje de la técnica que el profesor encargado de dicha enseñanza  se apoye en planteamiento metodológico más global; pero de orientación analítica. Es decir, un hibrido metodológico (que también se podría denominar mixto), ya que el proceso de maduración lo exige.
·         Durante esta edad el niño está muy interesado en aprender los gestos técnicos propios de la técnica; la labor del profesor es el de contextualizarlos situacionalmente a través de la táctica.
·         En estas categorías el principio pedagógico de la variabilidad emerge a favor de una característica del fútbol como deporte acíclico;  de tal manera que la tarea de aprendizaje debería contener diversos ejercicios  con el propósito de generar un incremento en su experiencia técnico motriz.
·         La mejor técnica pedagógica para que los niños aprendan haciendo la táctica en el fútbol, no es otra que la de platearle un problema o situación de fútbol por resolver.
·         En esta edad entre más “caótico” por no decir que embarullado sea la sesión de enseñanza; más posibilidades de aprendizaje ocurren en el preadolescente.
·         Dado a lo anterior, se podría decir que esta es la edad de la complejidad en la enseñanza del fútbol  por excelencia. En el pre-púber se está desarrollando un principio complejo: Recursividad Organizacional.
·         Recursividad Organizacional en el fútbol: entre más técnica yo transfigure en mí,  más tácticamente podré integrarme al equipo. Es decir sin técnica no hay táctica; sin táctica no hay técnica. Dicho de otra manera, la exigencia de unos gestos técnicos depurados son necesarios para poder recrear una exigencia táctica de equipo.
·         Es la edad del entrenamiento metafórico por excelencia. Se espera que el DT presente las situaciones de entrenamiento a partir de un juego, que les permita problematizar el contexto sin olvidar lo que ellos como individuos les corresponde hacer.  


Eso quiere decir, que antes de esta edad lo que se puede hacer con los niños y niñas es incentivar la exploración del juego; en muy pocos casos en un deporte en particular, todo lo contrario: mucha recreación, exploración de juegos en escenarios diversos tanto al aire libre como en sitio cubierto o cerrado; así como lúdica de juegos predeportivos.





1 comentario:

Unknown dijo...

la base de una buena enseñanza esta en una buena planificación todo debe ser de acuerdo a la edad y característica del medio que se trabaje así podemos lograr mejorar la capacidad y entendimiento del deportista a través de estímulos que vayan haciendo que cresca cada día mas en su medio